En el trading, la falta de protección del capital es el FINAL.

» Me asusto. Me doy cuenta de que quizás he ido demasiado lejos. Que la diferencia entre realidad e ilusión es la que existe entre cómo te parece que son las cosas y cómo son realmente. Y hoy, aunque en carrera no tuviera esa impresión, la realidad me ha puesto en peligro. Tomo consciencia de que el límite de mi cuerpo no está en mis brazos o en mis piernas, sino en mi cerebro. Y hoy, mi cerebro, pese al sufrimiento extremo, me ha mandado seguir, continuar encima de la moto, como si para él no hubiera límites. Me asalta el pánico. Tengo miedo. No quiero que mi mente vaya por libre. Yo quiero controlarla. No quiero que me lleve a un punto de no retorno. Sé que al Dakar venimos a sufrir, pero no soy estúpida. Yo no pretendo morir encima de una moto. No. Eso, no. Morir haciendo lo que más me gusta puede parecer poético, pero para mí no lo es. Yo no estoy loca. Mi sueño siempre ha sido ir al Dakar, aunque ¿qué sentido tiene todo si un día no vuelvo?» Laia Sanz, Quien tiene la voluntad tiene la fuerza.

 

Laia Sanz lo describe muy bien en este párrafo de su libro. Su mente iba desbocada mientras corría en el Dakar, impulsada por su pasión, por su ambición de quedar en un buen puesto, sin ser consciente en esos momentos, del peligro al que estaba expuesta arriesgándose tanto. Y cuando termina el día, reflexiona lo sucedido y se pregunta algo muy importante: «¿qué sentido tiene todo si un día no vuelvo?»

En el trading puede pasarnos algo similar, aunque, por suerte, no es la muerte la consecuencia del riesgo, pero si la muerte de lo que más nos gusta hacer, trading.

Puede ocurrirnos que, en ciertos días, ofuscados por malas operaciones, por una secuencia de trades negativos, por una mala semana, un mal mes, por lo que sea, que, apartemos nuestro lado racional y nos pongamos a entrar operaciones llevados por las emociones, rabia, venganza, querer recuperar lo perdido, desesperación, ira,… muchos sentimientos nos pueden llevar a quebrar una cuenta.

Hemos de ir autoanalizándonos constantemente mientras hacemos trading. Yo aconsejo, sea la operativa que sea la que hagamos, sobretodo en los inicios como trader, que al finalizar una operación, sea buena o mala, nos apartemos del ordenador, tomamos aire y reflexionemos sobre lo que acaba de ocurrir.

Hemos de hacernos un test emocional al cerrar una operación, sobretodo en intradía, donde las emociones son más fuertes. Lo primero a analizar es, si aquella operación se ha efectuado dentro de nuestro Trading Plan, porque como no haya sido así, ya podemos cerrar el ordenador.

Si ha sido positiva, de cuánto ha sido, qué hora es, cómo me encuentro (cansado,…) y analizar si vale la pena seguir o por hoy, damos por terminada la sesión. Si ha sido negativa, más énfasis, porque el deseo de recuperar y la venganza son emociones más fuertes. ¿la operación ha sido correcta? ¿la pérdida está dentro de mis límites? ¿cómo me encuentro para seguir?, ¿estoy tranquilo y soy capaz de hacer una segunda sin que operen mis emociones en vez de yo?

Reflexionemos bien al terminar cada operación, porque son los momentos donde más riesgo hay de dar rienda suelta a todas las emociones negativas y donde hay más probabilidad de quebrar una  cuenta.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

WhatsApp
El Espejo del Trader Reviews with ekomi.es