«No juzgues el día por la cosecha que has recogido, sino por las semillas que has plantado». Robert Louis Stevenson.

Si ansías la consistencia en el trading, no la busques intentando conseguir un trade espectacular, una operación con grandes beneficios, un día que dé para descorchar una botella de champagne.

No, la consistencia la encontrarás en la suma de infinitos días, cada uno de ellos sin haber obtenido grandes éxitos espectaculares, pero cada uno de ellos de un gran valor.

Es en la rutina del día a día, donde tu trading cogerá solidez, madurez y te irá acercando a la consistencia.

 

La rutina de hábitos saludables: dormir bien, llevar una buena alimentación, hacer deporte, encontrar momentos para el descanso… Tener el cuerpo bien, llevará a tener la mente clara y despejada, a estar activos y optimistas y a tener una buena actitud con la que enfrentarnos a las cosas del día a día. Recordemos que el trading es 85% gestión de emociones. Como no tengamos una buena base de partida, un acontecimiento negativo en el trading y en todo, se vuelve tres veces mayor y nos afecta muchísimo más con las consecuencias que ello puede traer.

La operativa en los mercados es el oficio con más activaciones emocionales que conozco. Es imprescindible prestar atención a nuestro cuerpo y cuidarlo. Cuando nos sentimos bien, nuestra psique se encuentra mejor y ello ayuda a superar mejor los obstáculos con los que nos encontremos.

La preparación de las sesiones o de cada activo que analicemos es muy importante. Debemos dedicarle el tiempo necesario y no hacerlo deprisa y corriendo. Hemos de empezar con el tiempo suficiente para hacer este trabajo previo de forma correcta y con calma. De esta forma, prestaremos atención a todos los detalles, observando y analizando los niveles relevantes, la fuerza del precio, las últimas rupturas o pull-backs que nos darán mucha información, podremos crearnos nuestros escenarios operativos con objetividad y las sesiones empezarán con tranquilidad, sin esa sensación de ponerte a operar nada más enchufar el ordenador y tendremos el foco puesto en los movimientos del precio para operar de la mejor manera que cada uno pueda hacerlo.

Cada sesión operativa es ORO. No podemos hacer trading como quién despacha operaciones. Hemos de valorar cada trade y cada sesión como únicos e irrepetibles.

Cada día de trading es un aprendizaje que no se repetirá. Hemos de estar al 100%, muy concentrados en lo que estamos haciendo y dando mucho valor a cada minuto de la sesión. Dalo todo en cada una de ellas, sin necesidad de estar mucho tiempo delante de la pantalla. Mejor poco y bien. No es la cantidad lo que te llevará al éxito, sino la calidad.

Analiza y repasa después, cada sesión operativa. Eleva el nivel de tu día a día como algo de mucho valor e irrepetible. Será ese aprendizaje diario lo que marcará tu evolución y lo que hará que se acorte o se alargue tu camino como trader consistente.

Muchas veces queremos que todo avance tan rápido y queremos llegar a ver beneficios tan deprisa, que no somos conscientes que es en la rutina diaria donde encontraremos la llave de la rentabilidad.

La rutina de cuidarnos a nosotros mismos para sentirnos bien y afrontar los obstáculos de forma optimista y resolutivos.

La rutina de valorar cada día de trading como si fuera el último, dando lo mejor de nosotros mismos en forma de concentración, dedicación, preparación y foco.
Es importante para todo ello, dedicar unos minutos antes de empezar el día a tomar conciencia de ello, a saber, que nos enfrentamos a un nuevo día donde debemos prestar atención a nuestra persona y a todo lo que vamos a hacer. A no avanzar por el día de forma descontrolada, sino a ser nosotros los que llevemos el control de éste.

Hagamos una pequeña lista en nuestra agenda de aquellas cosas que queremos hacer en ese día, de aquellas rutinas que nos ayudarán a que ese día transcurra como lo deseamos para conseguir nuestros objetivos.

Y al final de éste, hagamos una valoración. Dediquemos unos minutos a comprobar si hemos sido capaces de gestionar nuestro tiempo para conseguir haber sido lo más productivos posibles y haber sacado lo mejor de nosotros mismos.

A la vez, anotemos cómo hemos afrontado nuestra sesión de trading. ¿Hemos empezado enfocados y con buena predisposición? ¿Nos hemos dado el tiempo suficiente para hacer una buena preparación? ¿He estado 100% centrado mientras operaba?

Concluyendo, ¿ha sido un día que suma?

Bien, pues recordemos que esos días que suman, son un paso más hacia la consistencia. Es en la suma y suma de todos estos días, donde encontraremos todas las piedrecitas que construirán nuestro camino hacia la rentabilidad.

No busquemos grandes emociones en el trading. La rutina es nuestra aliada.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

WhatsApp
El Espejo del Trader Reviews with ekomi.es