«Por lo tanto, éste es su desafío y su tarea: identifique la persona que quiera ser y a continuación apúntese a una actividad social estructurada -un papel- que requiera que represente estos ideales.
Cree las reglas que reflejen su identidad deseada; viva los guiones que usted elija. Si puede ponerse a sí mismo en situaciones en las que practique de forma rutinaria ser la persona que quiera ser, rápidamente se convertirá en esa persona. El cambio comienza con una nueva experiencia, pero se mantiene mediante la repetición.» El entrenador de trading, de Brett N. Steenbarger.
Todos tenemos nuestros puntos débiles, con aspectos de nuestro carácter que queremos cambiar y no sabemos cómo empezar.
Queremos ser más disciplinados, más pacientes, hablar mejor en público…pero, a parte de tener el deseo en la cabeza, no sabemos cuáles son los primeros pasos a dar, qué herramientas utilizar y cómo enfocar el camino a seguir para ser mejores en aquello que queremos ser.
Brett N. Steenbarger, nos propone que seamos actores en nuestra propia vida, que desempeñemos papeles en los que justamente, destaquen cualidades que anhelamos tener. Por poner un ejemplo, si lo que queremos mejorar es el hablar en público, el quitarnos ese miedo escénico, podríamos apuntarnos a hacer teatro; o si queremos ser más disciplinados, practicar Tae Kwon Do, por poner algunos ejemplos.
En el trading se requiere de ciertas cualidades necesarias para tener éxito, ser paciente, ser disciplinado, ser humilde… y, seguramente, en alguna de ellas fallaremos en mayor o menor medida. Es natural.
Para cambiar algún aspecto muy arraigado en nuestra personalidad y que de esta forma, se produzca el cambio, hemos de trabajar desde la raiz del problema, no basta, a veces, ponerse reglas y normas por escrito y dejarlas encima de la mesa. Hay que trabajar desde la profundidad del problema y que ese cambio realmente se convierta en una transformación personal, para que revierta de forma positiva, no sólo en el trading, sino en toda nuestra vida.
Cuantas más veces interpretemos el papel que queremos ser, más retenido e interiorizado quedará en nosotros, hasta que finalmente, forme parte de nuestro carácter.